La novela de esta semana, El Anticuario, la adquirí de segunda mano y me llamó la atención por su portada repleta de libros. Pero más me sorprendió al abrirla y comprobar que su propietario se había deshecho del libro con dedicatoria incluida de su autor, el que fuera árbitro de baloncesto de la ACB, Julián Sánchez.
El protagonista, Enrique Alonso, es un escritor que vive en San Sebastián, hijo adoptado de Artur Aiguader, anticuario de Barcelona que ha muerto asesinado en su tienda de antigüedades. Justo antes de morir escribió una carta a su hijo relatando un gran descubrimiento que se hallaba escondido en un manuscrito que perteneció a Casadevall, maestro de obras de la catedral de Barcelona. Manuscrito que se encontraba en el último lote de antigüedades que adquirió, y que pocas personas conocen de su existencia, entre ellos el asesino.
El personaje principal presiente que la muerte del anticuario está relacionada con el manuscrito, por lo que tratará de descifrar el enigma que esconde, sin sospechar que es de proporciones inimaginables, involucrando a la comunidad judía en un pasado muy lejano. Además, sin saberlo Enrique Alonso se estará acercando peligrosamente a su verdugo.
El autor ha calcado el esquema de la novela de intriga básica que incluye un misterio que trata de ser resuelto por el protagonista y una mujer, mientras el peligro les acecha en cada paso en el que se acercan a la resolución del enigma. Momento en el que el malo se vislumbra poco a poco.
«Quien dice conocer a los demás es un presuntuoso (…) nunca sabemos cómo son los demás personas hasta que es demasiado tarde (…) nunca juzgues a los demás».
Personalmente esperaba más. Los poderes místicos de la trama no han logrado su efecto en la lectura, en parte porque el argumento me ha resultado conocido, lejano, como si hubiera leído con anterioridad la novela o visto una película con grandes similitudes. Además, la letra muy pequeña del ejemplar que compré ha contribuido a que la lectura se haya demorado hasta dos semanas.
Para finalizar, he encontrado varias citas entre sus líneas, siendo difícil escoger la que más me ha impactado, por lo que os dejo dos de ellas:
«La magia del pasado remoto se pierde y se adultera con el paso de los años, y se conserva en el recuerdo».
«No existen amistades eternas cuando en el camino de dos hombres se cruzan el dinero, el poder o una mujer (…) todo tiene un precio. Basta con encontrar el resorte adecuado y conseguirás que un hombre haga algo que jamás se hubiera imaginado».
Novela: El Anticuario
Autor: Julián Sánchez
Categoría: Narrativa/Intriga
Recomendación: Para pasar el rato.
Morgana Huxley 