No había leído nada de Eloy Moreno desde Bolígrafo de gel verde en 2009, pero aún recuerdo ese sabor dulce y nostálgico y por ello, nada más encontrar Tierra, he decidido desembarcar para descubrir qué me deparará esta novela.
Argumento
Dos hermanos comienzan un juego con su padre, un juego con una promesa por parte de su parte: si lo completan hasta el final tendrán un deseo. Sin embargo, ese juego romperá el vínculo de unión que une a ambos hermanos.
Años más tarde, el padre, famoso, un hombre mediático al que odian igual que adoran estrenará su última función y será el momento para retomar ese juego y con ello la unión entre ambos hermanos.
Mi opinión
La lectura de Tierra me ha dejado un regusto agridulce.
Por un lado, es una obra compleja y sencilla al mismo tiempo. ¿Cómo es esto? La idea me ha parecido interesante, entretenida, con una escritura accesible, de rápida lectura y muy original. Tiene estructura con muchos frentes abiertos que, como la propia vida, convergen entre ellos. Nada sencillo, máxime con todos los personajes que aparecen como: la protagonista Nellyne y su hermano Alan, el padre, Will Miller, y los concursantes del viaje espacial: Veruca, Andrea, Frank, John, la doctora, la Miss, el Manitas y el Jardinero.
Me han encantado las reflexiones de la novela, con esas múltiples censuras y reproches hacia la sociedad actual.
«Todo era público todo era opinable«.
He aquí el ecosistema perfecto para ganar dinero: una educación mediocre, un trabajo que ocupa todo el día por un mísero sueldo y al llegar a casa verán dónde gastar ese dinero.
No nos podemos sacar de la ecuación del problema («Todo lo que nos ocurre también es culpa nuestra«), por alimentar la cultura de los programas de entretenimiento como los reality shows («¿Quién en su sano juicio va a pasarse el tiempo viendo la vida de otras personas cuando podrían estar viviendo la suya?«), el uso (o mejor dicho mal uso) de las nuevas tecnologías («no era la primera vez que las redes sociales habían dictado sentencia y un desequilibrado lo había ejecutado»; «Las redes sociales no saben de duelo, respeto o empatía»), el efecto rebaño («la multitud sólo mira en una dirección, y a veces no es la correcta»), la importancia del sistema educativo («cada vez el nivel de los alumnos que llegan es más bajo. La educación, al igual que la sociedad, se va degradando año a año»), que no es igual en todos los países con la hipocresía de algunas culturas («que aún consideraban a la mujer inferior al hombre, lugares donde parecía que la tecnología avanzaba mucho más rápido que la mente»), con ese constante empeño en remover el pasado («El odio no descansa ni con los muertos»), que es rentable para unos pocos («No importa si esto es verdad o mentira, a veces a la realidad se le da demasiada importancia«). No podemos obviar dos temas cruciales y muy unidos entre sí: el consumismo («Si hay una fábrica en China haciendo millones de juguetes inservibles para Mc Donald´s es porque los padres les compran el Happy Meal a sus hijos para tirar el juguete en cuanto llega a casa». Si las empresas fabrican el plástico es porque lo consumimos«), y el más importante sobre el que gira la trama el cambio climático («no somos más que un virus destinado a destruir la Tierra«)
Por otro lado, y después de introducir toda esta mar de ideas en una novela, con gran acierto he de decir, me parece que ha fallado lo más simple, la consecución. Los capítulos son excesivamente cortos, la mayoría de dos hojas, con intención de generar tensión e interés en el lector que consigue en un inicio, pero al llegar a la página trescientos, resulta agotador y cuando corta de golpe una escena no sólo no me parece necesario, me resulta molesto. Además, hacia el final del libro, el salto temporal descoloca. Sinceramente, si hubiera unido más los capítulos para seguir una continuidad de hechos, generaría mayor intriga y ganaría mucho más la historia y conseguiría una gran obra.
En definitiva, es una novela dinámica, escrita como un thriller, pero a diferencia de éstos tiene un mensaje profundo que expone a través de cada uno de los personajes con sus miedos, deseos, remordimientos y fantasmas. Sin duda, es una obra muy completa que me hace pensar que su autor es una persona con las ideas claras y la cabeza muy bien amueblada.
Para finalizar, es difícil escoger una cita, máxime cuando ya he transcrito las que más me han llamado la atención, pero os voy a dejar una de las primeras páginas de George Orwell, que resume la idea de la novela.
«En una época de engaño universal, decir la verdad es un acto revolucionario».
Novela: Tierra
Autor: Eloy Moreno
Categoría: Ficción / Suspense
Recomendación: Muy interesante, plenamente recomendable para todo tipo de público.