Esa mítica frase, España va Bien, que popularizó el ex presidente del Gobierno, José María Aznar, se repite en mi cabeza incesantemente, y hasta me lo creería si no fuera porque no cesan las noticias de apropiaciones indebidas, prevaricación, blanqueo de capitales y chanchullos varios. El caso de la trama Gürtel es uno de los más conocidos en el panorama político. Lo cierto es que a estas alturas ya cansa oír hasta el nombre.
Aeropuertos fantasmas, presidentes de Comunidades Autónomas cuyas arcas han sido limpiadas y pulidas con esmero, algunas de forma burda en una única legislatura y, en otras de forma más sutil y silenciosa, durante varias, como en el caso de la Generalitat, o al menos presuntamente. Si es que uno a todo se acostumbra, sobre todo si son vicios insanos.
No hace falta ni comentar lo oportuno que ha sido que salga justo ahora a la luz, cuando Artur Mas sigue insistiendo, Mas y Mas, con una consulta ciudadana. Supongo que tiene buenas referencias de todo lo que se puede sacar de unas arcas públicas. Lo que me resulta más curioso es la fecha escogida para la consulta, convocada para el día 9 de noviembre (9-N), el día de la Almudena.
No en vano, recuerdo hace algunos años cuando el por entonces alcalde de Madrid, José María Álvarez del Manzano, alegaba que se llevaba a su mujer a las visitas oficiales porque estaba «muy enamorado». Y ahí todos los madrileños pagaban el viaje y regalos varios que insistía en ofrecer a su señora, eso sí, con el dinero ajeno.
Hoy en día parece que estafan y roban todos los que manejan dinero. Los hay que se inventan alumnos para cursos de formación on line de los que se sacan subvenciones, y cuyos alumnos son tan sumamente aplicados que aprueban sin fallar ni una de las preguntas. Hombre, la idea está clara: Ya que no van, que ¡tampoco suspendan!
Otros casos que han salido últimamente a la palestra son el caso de los ERES de UGT, o enmascarando las cuentas de la empresa (caso Gowex), aunque de estos últimos hay muchos. Ya ni menciono el caso Noos, ni las corruptelas en el Ayto de Marbella. Está claro que en este país no se salva ni la realeza, ni personajes del mundo de la farándula.
En definitiva, que parece que si no robas eres un cenutrio. Cualquier día de estos estará mal visto hasta ser honrado. Por eso no me parece descabellado que se comience a plantear una reforma en la educación en la que se incluyan clases de honradez y sentido común (ese gran desconocido). Pero, qué os voy a contar, si con José Luis Rodríguez Zapatero hubo una gran polémica con la introducción de la asignatura de Educación para la Ciudadanía como obligatoria y evaluable, y se le echó encima todo el mundo político y académico, creyendo que cometía una locura. Estoy pensando que, en ese sentido, era un visionario.
Lo importante en España es una reforma de la educación en la que todos los alumnos reciban la misma formación, independientemente de la Comunidad Autónoma en la que se imparta la enseñanza, y por supuesto, nada partidista. Está en juego el futuro de las generaciones venideras. Y así, es posible que en el futuro podamos decir: España va bien.
En definitiva, con clases o no, está claro que en España se consigue robar y estafar como en ninguna otra parte. De hecho, en nuestro país hemos cobijado desde nazis a mafiosos. Como somos muy tolerantes e interraciales no hacemos distinciones. Por lo que, aquí encuentran cabida un sinfín de simpatizantes de lo ajeno independientemente de su raza, sexo y religión. En eso sí somos muy democráticos, somos iguales, al menos eso dice la Constitución.
En fin, quizá después de todo solo sean cosas mías y España va bien. ¿No lo dijo también SKA-P en su canción?.