Una vez más, atraída por los libros me he decantado por la lectura de El Taller de los Libros Prohibidos, del escritor español, ingeniero industrial y profesor afincado en Alemania, Eduardo Roca.
La novela está ambientada en la ciudad de Colonia en el siglo XV. El saber está en manos de los nobles y la Iglesia. Pero el cambio está cerca de la mano de un pequeño grupo de sabios y eruditos que contactarán y ayudarán, en la medida de lo posible, al protagonista (Lorenz), un humilde orfebre al que la vida no le ha tratado muy bien, pero que subsiste junto con su hija las penurias de la época, trabajando en el taller de su suegro.
El protagonista es un hombre sencillo, tranquilo, minucioso, detallista, honrado y con gran tesón. Cualidades que hacen de él la persona idónea para idear un método con el que evitar que el conocimiento y la adquisición de libros esté en manos de unos pocos, a pesar de los riesgos que con ello conlleve.



