El traje del muerto (Joe Hill)

Estaba en la biblioteca buscando un libro cuando me encontré con un título que llamó mi atención, El traje del muerto (Heart-Shaped Box), del escritor Joseph Hillstrom King, más conocido como Joe Hill. No ha sido hasta acabar la lectura cuando me he informado sobre el autor y me he sorprendido, pero a la vez, he entendido ese comienzo que tanto me recordaba a Stephen King, su padre.

Argumento

Judas Coyne es una estrella de rock, que vive con su joven novia gótica, Georgia, y sus dos perros Angus y Bon. Además, Judas Coyne es un coleccionista de objetos macabros como un libro de cocina para caníbales, una película snuff. Sus gustos excéntricos por todo lo fuera de lo normal es conocido. Pero nada de lo que posee es tan insólitocomo el último descubrimiento de su asistente: un fantasma ligado a un traje.

Jude lo comprará por mil dólares y se convertirá así en el orgulloso propietario de un fantasta. No tiene miedo, pero pronto se dará cuenta de que al fantasma le une una razón poderosa para acabar con él y su vida se convertirá en una pesadilla sin fin.

Mi opinión

En un primer momento, desconociendo el parentesco del autor con Stephen King, creí detectar la punzante y mortal pluma del rey del terror. Por eso, una vez que he acabado la lectura y he buscado acerca de este autor, es como si las piezas hubieran encajado. Joe Hill es digno sucesor de su padre. He pasado páginas sumida en la angustia, la intriga y el nerviosismo por ayudar al protagonista a escapar de las garras del fantasma.

«Los muertos arrastran hacia el abismo a los vivos»

Los capítulos son cortos, pero intensos, en los que trata de esos temas que tanto me apasionan y me aterrorizan por igual, como son la ouija, la lectura de manos, el hipnotismo y el mentalismo.

Los personajes son escasos, pero bien definidos. Los más importantes son: el protagonista, Justin Cowzynski, cuyo nombre artístico es Judas Coyne, su asistente personal Danny Wooten, Anna McDermott su exnovia a la que llamaba Florida, Jessica Pride, la hermana de ésta y el padrastro Cradock McDermott. El padre, Martin, la enfermera y cuidadora de éste, Arlene Wade y, por último, la abuela de Georgia, Bammy. Por supuesto, que he de hacer mención especial a los pastores alemanes del cantante, Angus y Bon, que son una parte fundamental de la obra por su lealtad y amor incondicional. Algo que apreciamos todos los que tenemos un amigo tan fiel.

Por otro lado, me ha parecido encontrar cierta similitud en las conquistas del músico, ya que tanto Florida como Georgia, parecen cortadas por el mismo patrón, no sólo por las heridas del pasado, también por la diferencia de edad, ya que el protagonista se lleva casi treinta años con cada una de ellas. Hecho que me ha recordado a Leonardo DiCaprio, de quien dicen que no ha salido con una mujer mayor de veinticinco años. A su vez, el personaje de Marybeth (Georgia), me ha parecido bastante más maduro para su edad.

«Lo que se ha desgastado un poco resulta más interesante que algo impoluto, que nunca ha sido rayado»

En definitiva, El traje del muerto es una historia paranormal muy entretenida, que genera interés, incluso ansiedad y tensión.

Para finalizar, me gustaría dejar una frase que se puede extrapolar a diferentes situaciones.

«El único poder que tiene sobre cada uno de ustedes es el que ustedes mismos le dan»

Novela: El traje del muerto
Autor: Joe Hill

Categoría: Bestseller / Terror
Recomendación: Para los amantes del terror.

Anuncio publicitario

Deja un comentario

Archivado bajo Best-sellers, Ciencias Ocultas, Fantástica, Intriga, Misterio, Terror, Thriller

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.