Buscaba una lectura entretenida, de esas que te enganchan desde la primera página, y en cuanto vi el último libro de Manel Loureiro, La puerta, lo tuve claro. Tenía el entretenimiento asegurado.
Argumento
El hallazgo del cadáver de una joven, asesinada mediante una antigua forma ritual a los pies de la mítica Puerta de Alén, desconcierta a sus investigadores. La agente Raquel Colina es una recién llegada a ese rincón perdido de Galicia para tratar de salvar a su hijo, al que la medicina ya no puede curar. Sin otra alternativa, y llena de dudas, Raquel había recurrido a una menciñeira local, que prometía su sanación.
Sin embargo, la misteriosa desaparición de la curandera y el descubrimiento de la vítctima de la Puerta hacen sospechar a Raquel que ambos casos pueden estar relacionados. Con la complicidad de su compañero, en un ambiente mágico y rural que no acaba de comprender y donde todo el mundo parece guardar un secreto, la agente comenzará una desesperada cuenta atrás para resolver el caso y así hallar la última tabla de salvación que le queda a su hijo.
Mi opinión
Una vez más, el estilo de Manel Loureiro no decepciona y demuestra por qué se ha ganado el mote del Stephen King español.
Los personajes no son muchos, pero están muy bien perfilados. Así tenemos a Raquel Colina (guardia civil) y su hijo Julián, que se trasladan a Arufe para trabajar en el puesto de comandancia de Guardia Civil más cercano a la curandera, Ramona Valonga, la única que puede salvar a su hijo Julián, desahuciado del sistema de salud. Al que sólo le ofrecían como último recurso participar en una terapia experimental:
«Solo se le podía ofrecer a desahuciados y desesperados, sin correr el riesgo de que te denuncien al colegio de médicos por falta de ética profesional»
«Solo si eres padre de un niño condenado puedes compartir ese deseo de aullar a la luna y maldecir al universo por cambiar las reglas del juego de forma tan cruel»
Allí se encontrarán con el sargento Nogueira, su entrañable compañero Juan Vilanova, la dueña de la Casa Grande de Fosco, Ágata, el vecino Saavedra. Pero investigando la muerte de una mujer en lo alto del monte Seixo encontrarán coincidencias con el caso del sargento retirado Andrés Méndez y ponerlos tras la pista sobre la que investigar les pondrá en peligro.
La puerta es una lectura adictiva, que engancha desde el comienzo con esa dosis de terror y tensión, junto con una descripción ambiental espectacular que sumerge al lector en esas montañas gallegas, zonas inaccesibles y prácticamente deshabitadas en las que cuando llueve parece que comienza a caer el Diluvio Universal y cuando llega la calma y reina ese silencio antinatural, se estremece hasta el alma.
Me he metido de lleno en el libro y me he visto envuelta en esa atmósfera fría y desapacible, rodeada de niebla, que describe con gran maestría (como en su libro El último pasajero) y que me ha recordado a mi pueblo, una aldea rodeada de montañas con pistas de tierra y caminos poco transitables en los que todos los vecinos se conocen y, precisamente por este motivo, me ha llamado la atención el desconocimiento por parte del guardia civil de las gentes de esos pueblos. Es factible, no digo que no, pero me resulta raro. Sin embargo, hay otros datos que sí me chirrían y me han hecho pasar páginas hacia atrás para asegurarme de que lo había entendido bien, como cuando menciona al padre ausente que paga las facturas, pero ella, trabajando, temía vivir de la caridad, o dejar a la casera, una anciana a la que acaba de conocer, a cargo de su hijo durante días enteros. Un rato, puede. ¿Todos los días? Dudoso. También hay alguna incongruencia como cuando visitan Arufe con la intención de echar un vistazo rápido para no dejar el puesto solo y cuando finalizan se van directos a casa. En definitiva, hay algunos puntos que flojean la trama y le restan credibilidad.
Dejando a un lado esos pequeños detalles, es una novela muy entretenida, con una atmósfera envolvente, que consigue atrapar en el misterio que rodea a este escenario natural y real, que es el monte Seixo y A Portalén (Porta do Alén). Aquí me gustaría hacer un inciso, ya que, siendo un sitio real, hubiera quedado mucho mejor una imagen en la portada de La Puerta, que, según la creencia mitólogica conecta el mundo de los vivos y los muertos.
«Detrás de cada leyenda siempre se esconde un trozo de verdad»
«Que crea que es verdad no significa que lo sea»
Para finalizar, he extraído una cita que tiene que ver con la esencia de la trama y de la vida.
«El ciclo de la vida y de la muerte es una noria que no para jamás»
Novela: La puerta
Autor: Manel Loureiro
Categoría: Narrativa / Intriga /Drama
Recomendación: Dejando a un lado esos pequeños detalles, me ha parecido una novela muy entretenida, adictiva, con mucha tensión y un poco de terror, muy recomendable para desconectar del día a día.
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