Hace tiempo que no leía a uno de los maestros del suspense como es James Patterson y al topar con Vías cruzadas (Cross Justice), no he dudado ni un segundo en leer este libro, perteneciente a la saga del detective Alex Cross.
Tras pasar más de treinta años en Washington, el célebre detective Alex Cross regresa a Starksville, su ciudad natal. Su presencia resulta incómoda para algunos, sobre todo cuando decide investigar el caso de su primo, acusado de cometer un horrible crimen. Cada paso que da le acerca a un asesino abominable, de corazón frío, y a la verdad sobre su propio pasado. Las respuestas que encuentra pueden ser fatales. Pero el afán de justicia de Cross es insaciable.
Mi opinión
Vías cruzadas está ambientada a caballo entre Florida y Starkville, un pequeño pueblo de Carolina del Norte.
El autor no sólo utiliza dos tipos de narración, primera y tercera persona, en función de si en los hechos está implicado el protagonista o no, sino que también hace uso de varias líneas argumentales, como si una no fuera suficiente.
El protagonista es Alex Cross, ex agente del FBI e inspector de New York, que acude a su lugar de nacimiento para destapar la verdad de un caso en el que está acusado su primo Stefan.
«Un hombre vale lo que vale su palabra»
Pero, a veces, la verdad está más oculta de lo que uno cree y Alex Cross tendrá que lidiar con aspectos de su pasado que desconocía.
«Las cosas nunca son lo mismo cuando vuelves».
Además de Alex Cross cabe destacar otros personajes relevantes en la trama: Bree (su mujer), Ali (su hijo de 7 años), Janine (hija de 15 años dotada para el atletismo), Regina Cross (alias Nana Mama, su abuela), Connie Lou (su tía), Hattie y Cliff (sus tíos), Naomi (su sobrina y abogada de su primo Stefan) La novia del acusado Patty Converse, la vecina de ésta Sydney Fox, Delilah Strong (fiscal), Matthew Brady (ayudante de fiscal), Erasmus Varney (juez), Randy Sherman (jefe de policía), Nathan Bean (sheriff), Guy Pedelini (detecte oficial del condado de Stark y los detectives Carmichael y Frost.
En cuanto al escenario en Palm Beach (Florida), cabe destacar a Coco que está sembrando el terror entre las clases más altas y los inspectores de policía que siguen su rastro Peter Drummond y Richard S. Johnson.
Vías cruzadas tiene dos de los aspectos que más me atraen de una novela (el suspense y los juicios). El estilo es sencillo y directo, con pequeñas dosis de emoción e intriga, a las que se unen unos giros argumentales, que consiguen sorprender y agradar con una lectura fluida y entretenida.
Narrada de forma cinematográfica, de modo que es muy fácil visualizar cada una de las escenas que están llenas de acción, investigación y suspense a lo largo de los más de cien capítulos que desarrollan escenas de la vida cotidiana, como con las pruebas de atletismo y otras más emotivas como el Alzheimer.
Por otro lado, en un primer momento, el ritmo ágil de la novela no me ha permitido perfilar la descripción física de los personajes (ni he caído en la cuenta de que una de sus novelas,el Coleccionista de amantes, fue llevada a la pantalla de la mano de Morgan Freeman) hasta que en determinado momento se explica que los Cross son afroamericanos y ha sido a partir de ese instante en que me he metido de lleno en la trama, al adquirir mayor sentido con el tema del racismo de fondo.
Para finalizar he escogido una cita muy similar a la de Isabel Allende en Retrato en sepia («ya todos estamos en edad de tirar por la borda los sentimientos que no nos sirven para nada y quedarnos con aquellos que nos ayudan a vivir»)
«En una vida larga hay cosas que es mejor dejar de lado»
Novela: Vías cruzadas
Autor: James Patterson
Categoría: Thriller/ Best-seller/ Novela negra
Recomendación: Para los amantes del suspense.