En ocasiones me dejo guiar por la intuición al escoger un libro, obteniendo resultados tan sorprendentes como el de esta semana con El silencio de la ciudad blanca, la cuarta novela de la optometrista Eva García Saénz de Urturi, que para mí era una auténtica desconocida hasta la fecha, en que me he convertido en una fan devota.
El argumento se centra en la ciudad de Vitoria en dos líneas temporales narradas con cuarenta y cuatro años de diferencia.
En la época actual Tasio Ortiz de Zárate, el brillante arqueólogo condenado por los asesinatos que aterrorizaron Vitoria hace dos décadas está a punto de salir de prisión cuando los crímenes se reanudan con la aparición de los cuerpos de una pareja de jóvenes muerta por picaduras de abeja en la garganta.
Los asesinatos con rituales en enclaves históricos son, en apariencia, el mismo modus operandi que los anteriores crímenes acaecidos hace veinte años y que llevaron a Ignacio Ortiz de Zárate a encarcelar a su hermano gemelo Tasio.
La subcomisaria Alba Díaz de Salvatierra encomendará el caso a la inspectora de la División de Investigación Criminal especialista en victimología (Estíbaliz Ruiz de Gauna), y al protagonista Unai López de Ayala (Kraken), experto en perfiles criminales, que ante el descubrimiento de un nuevo cadáver rezará:
«Aquí termina tu caza, aquí comienza la mía».
El protagonista obsesionado con resolver el crimen, se imbuirá en el caso, analizando minuciosamente los detalles de los anteriores asesinatos. Pero, desde el prólogo se pone en antecedentes al lector de lo que sucederá:
«yo no salí bien parado. Terminé, como digo, con una bala en el cerebro (…). Cuando el que se pone a matar en cadena es un puñetero genio, solo puedes rezar para que tu bola no salga del bombo dorado y el niño de turno no cante tu número con voz temblorosa«
Personalmente, la lectura me ha sorprendido gratamente. Ha sido todo un descubrimiento de esta autora que tuvo que editar su primera novela a través de Amazon.
Me he sumergido en la lectura sin descanso, gracias a una trama absorbente, entretenida, muy bien hilada que consigue enganchar en las dos líneas temporales, gracias a unos personajes minuciosamente perfilados. No obstante, se deduce la identidad del asesino desde su aparición. A pesar de ello, el acabado es inmejorable y éste es el modelo de novela que a mí me gustaría publicar un día.
El libro está narrado en primera persona. La ambientación parece una guía turística de la ciudad de Vitoria, mostrando en distintos pasajes los lugares típicos de interés.
Tanto me ha llamado la atención El silencio de la ciudad blanca que he investigado acerca de la autora, Eva Gª Sáenz de Urturi, hasta descubrir que tardó cuatro meses en hacer el borrador. Y se ha estado preparando para escribir la novela, para ello contactó con una academia en la que formaban a policías en perfil psicológico, inspección técnica ocular, y revelado de huellas. Se centró en la parte de perfilación de personajes pensando en su público de más de 60 años que detesta la violencia y la tortura.
Finalmente, he escogido de entre las frases de la novela las que más me han gustado:
«Hay cosas que… que prefiero guardar para mí. Duelen demasiado como para contarlas».
«Comprendí que el dolor también une a las personas, tal vez más que las alegrías, porque de esas, como buenos desagradecidos que todos somos, nos olvidamos pronto».
«A veces es tan sencillo como poner la oreja y escuchar (…). A veces sólo hay que escuchar».
Novela: El silencio de la ciudad blanca
Autor: Eva García Saénz de Urturi
Categoría: Intriga/Novela negra
Recomendación: Para amantes del suspense y la novela negra.
Curiosidad: el director de Atresmedia, Mikel Lejarza, en cuanto leyó la novela pensó que era muy cinematográfica y compró los derechos. Por lo que próximamente contaremos con su adaptación audiovisual.